Mejore sus Oportunidades de Quedar Embarazada con los Servicios Integrales de Evaluación de la Fertilidad
Es posible realizarle pruebas a sus embriones, producidos por fecundación in vitro, para asegurar que tienen el número correcto de cromosomas (PGS) o para verificar la presencia de genes únicos específicos que puedan causar enfermedades (PGD). Para hacer esto, se deja crecer a los embriones hasta una etapa llamada blastocito la cual toma de cinco a seis días. Varias de las células de los embriones son removidas durante un procedimiento quirúrgico microscópico conocido como biopsia embrionaria, y luego son analizadas por un laboratorio especializado en genética. Su médico puede entonces transferir los embriones sabiendo que contienen el número normal de cromosomas, aumentando la probabilidad de quedar embarazada.
Contrario al conocimiento histórico, la infertilidad no es un problema femenino estrictamente e involucra al hombre en casi la mitad de los casos. La infertilidad masculina tiene varias causas, entre las que se incluyen desórdenes endocrinos, obstrucciones del tracto reproductivo, problemas genéticos y anormalidades en los espermatozoides que se producen. La mayoría de las formas de infertilidad masculina pueden ser tratadas, y todas las evaluaciones de infertilidad iniciales incluyen un análisis de semen. En esta prueba, la muestra de semen es analizada por su volumen, conteo de espermatozoides, la calidad del movimiento de los espermatozoides, la forma de los espermatozoides y la presencia de posibles anticuerpos antiespermatozoides que dificulten la fertilidad. Con los métodos actuales, la mayoría de los hombres que tienen un factor de infertilidad todavía pueden ser padres a través de la fecundación in vitro.
Sin importar su sexo, las hormonas juegan un papel significativo en la capacidad, o incapacidad, de procrear. Las hormonas son sustancias reguladoras que estimulan la acción en las células y los tejidos de su cuerpo, y deben estar balanceadas para que este último pueda funcionar adecuadamente. Ciertos desequilibrios hormonales pueden contribuir a la infertilidad, y las pruebas hormonales nos permiten detectar y tratar estos problemas con un plan de tratamiento hormonal personalizado.
Su suministro de óvulos, o su reserva ovárica, disminuye consistentemente a lo largo de su vida, comenzando desde antes del nacimiento. A medida que una mujer envejece, el número de óvulos que tiene disminuye hasta que, avanzada su vida, el último de sus óvulos se acaba y comienza la menopausia. Una evaluación de la reserva ovárica es vital para los diagnósticos de fertilidad efectivos y mide el número de óvulos que una mujer tiene actualmente. Si la reserva ovárica de una mujer es muy baja, podría ser candidata para una fecundación in vitro usando óvulos donados.
Si experimenta un sangrado uterino anormal o si tiene dificultad para concebir, una histeroscopia permite que su médico pueda ver el interior de su útero para inspeccionarlo en busca de señales de anormalidad. Un histeroscopio es un tubo delgado con una luz y una cámara para proporcionar imágenes claras y concisas de las paredes del útero. La histeroscopia también permite que su médico pueda operarla inmediatamente, si fuera necesario, insertando pequeños instrumentos quirúrgicos a través del histeroscopio.
La andrología es el estudio de los tejidos específicos al hombre, e incluye un análisis de semen y hormonas para evaluar la fertilidad masculina. La embriología es el estudio de los óvulos fertilizados y su progreso a medida que se convierten en fetos. Nuestro laboratorio de andrología y embriología nos permite realizar análisis de infertilidad, así como fertilizar y cultivar embriones hasta que estén listos para su implantación, todo dentro del mismo centro para la fertilidad. Al poder realizar pruebas de diagnóstico en el lugar, se acorta el tiempo que nuestros pacientes tienen que esperar por los resultados y nos permite prescribir un tratamiento pronto.